Los perros guías o lazarillos, no tienen una raza especial, son guías, pero son mascotas, han llegado a entenderse tanto y a complementarse, que uno como que está en el otro. El humano depende del perro en muchas cosas, el animal también. Desde hace muchos años los perros se han adiestrado para acompañar, para guiar a personas con alguna discapacidad, o enfermedad.
Los más conocidos son los guías para personas ciegas o de baja visión, les permiten salir de su casa, cruzar calles con semáforos, ir a oficinas etc, con apenas una orden y luego una recompensa el perro los ayuda, se complementan, les ha permitido tener más independencia, más libertad.
El bastón blanco debe ser usado igual, porque en un momento puede no estar dispuesto y lo necesitará.
Los perros guías son caros, muchas veces el que lo necesita no lo puede comprar, actualmente se están creando asociaciones para abaratarlos, se tendría que legislar sobre el tema. El entrenamiento es lo que lo encarece, todo comienza seleccionando a la madre, no todos los cachorros de todas las razas de perros pueden convertirse en perro guía, a veces uno sólo de una camada está apto, o ninguno, después de unos meses con la madre pasa a ser entrenado.
Va con una familia para que le enseñe lo básico, que lo eduque, andar en público acostumbrarse al bullicio, al año pasa al entrenamiento en si, andar por oficinas, ómnibus etc. los instructores tienen un carné para que los dejen pasar, este aprendizaje dura hasta los tres años, deben saber buscar un asiento en un ómnibus, caminar pegado a su dueño. Luego viene la prueba más importante, el entendimiento del animal y su dueño, dura tres semanas.
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